¡Magnífica Clase Abierta necropia sobre Virginia Woolf! Éxito rotundo de convocatoria y taquilla (5 euros de cookies and teas, vamos sumando, hasta las 500 libras y un cuarto propio no paramos) y comentarios afilados, me quedo con la confesión de Clara de que de niña querá ser niño y con la poesía de Blanca declamada por ella misma como puntos sobresalientes (si no consideramos mi ladrido Woolf Woolf, que no se por qué pasó desapercibido, como dice Nietzsche, «algunos nacemos de manera póstuma»).
Estupendas presentaciones de Peter que se estrenó en el casillero «Farolillo Verde» con aplomo sociológico, e interesantes comentarios de Marian, Alex, Juls y Lu sobre sus libros y homeworks respectivas, amén de los comentarios wolfflondonianos del librito sobre las calles de Londres hechos por Magalí y Mariucha. El martes me gustaría que dedicáramos un momento a comentar posibles mejoras en el formato (ya las comentamos en el Club de Filo y fueron muy interesantes), es cierto que no fuimos tan detallistas como podríamos haber sido, comentando subrayados por ejemplo, pero si ganamos en detalle perdemos en valoración general, que es a lo que en principio apuntamos con las clases abiertas.
Aquí os paso el Acta de Susana, mi lugarteniente actual en la Autónoma, a veces hablo en sueños con ella para pedirle que me recuerde tal o cual cosa, y la pobre Olga se despierta y me mira como diciendo, a lo Simone Weil, «¿Amor fatii?». Ahí va:
«Empezamos la clase con una presentación de la vida de Virginia hecha por Peter (?), que nos introdujo un poco en el tema que nos ocupaba. Vemos que ha tenido una vida interesante y bastante dura en algunos aspectos, hasta el punto de ahogarse en el río porque por culpa de su enfermedad (sufría de bipolaridad), decía que ya no podía ni leer ni escribir.
El martes terminaremos de leer el relato de Lorrie Moore que tenemos en el tintero y Marrone nos contará en plan autobiográfico cómo escribió su Tesis Doctoral. Peter se está ocupando de organizar la visita a la expo de Mapfre a la que podríamos ir juntos, y a ver si podemos hacer el Club Cine en lo de Lau en plan despedida de nuestra queridísima Presidenta de la Comisión de Fiestas y Secretaria General del Club del Vermú, que al parecer tiró de talonario y la contrató en exclusividad. Enormísima tristeza del necropio manipulador por la marcha de Lau, esa abogada del Diablo freixiana a la que no puedo reprender que diga cosas sin haber leído los libros porque se marcha, jaja…